Lecciones que ‘Barbie’ nos dejó y no debemos olvidar
La película más esperada del año ya está en cines mexicanos y nos ha dejado una cosa muy clara: no solamente es la más esperada, sino también se encuentra entre las cintas más importantes y necesarias. La historia que Greta Gerwig quiso contar en “Barbie” tiene un mensaje que millones de mujeres queríamos escuchar en una sala de cine y que Hollywood tal vez no quería, pero necesita escuchar.
A muchas personas no les va a gustar y hasta la odiarán, pero eso también suele pasar con los mensajes necesarios. Y que soporten…
Nosotras no queríamos dejar pasar la oportunidad de hablar un poco sobre algunas de las lecciones que “Barbie” nos dejó como parte de su sátira social e historia de amor propio.
Por qué “Barbie” es tan importante
Este año ha sido atípico para Hollywood. Franquicias importantes y películas de las que se esperaban números arrasadores se quedaron muy por debajo de las expectativas: “Fast X”, “Shazam! Fury of the gods”, “The Flash” e “Indiana Jones and the dial of destiny” son los principales ejemplos.
En contraste, la película que se ha convertido en un fenómeno es una producción con una mujer como directora, una mujer como protagonista y un mensaje abiertamente feminista al frente. Parece que tomó por sorpresa una industria donde la brecha de género todavía es enorme.
De acuerdo con la revista Variety, “Barbie” es el mayor debut del año, ganando 155 millones de dólares en su primer fin de semana, tan solo en Estados Unidos. Superó por mucho los 80.5 millones de “Oppenheimer”, la cinta de uno de los directores más respetados e importantes de Hollywood.
Aquí no estamos cuestionando la calidad de ninguna de las dos producciones y, como la misma Greta Gerwig ha dicho, no se trata de arrebatar audiencias ni crear una rivalidad innecesaria. Simplemente lo que está pasando tampoco se puede ignorar.
“Barbie” es el estreno más exitoso de una película dirigida por una mujer. En Estados Unidos el 65% aproximado de sus primeras audiencias se conformaba por mujeres, lo cual es de interés porque la estadística suele colocarse al revés.
Lecciones que “Barbie” nos dejó
Hay muchos niveles y capas en los que podríamos hablar de esta película. Hoy elegimos hablar principalmente sobre su narrativa. Estas son algunas lecciones que “Barbie” nos dejó. A continuación vienen bastantes SPOILERS de la cinta.
- Eres la dueña de tu destino
En los primeros minutos de la película hay una referencia bastante divertida a “2001: Odisea del espacio” para ilustrar el impacto cultural que tuvo la muñeca Barbie tras su creación. Es un mensaje que tantas décadas después muchas damos por sentado, pero que no pierde relevancia.
Básicamente, la película nos muestra que Barbie rompió el paradigma de los juguetes “para niñas”. No, no naciste para ser ama de casa y tener bebés; es una posibilidad y es válido quererlo, pero no es una obligación ni el único camino.
Tú eres la responsable de labrar tu destino. Como te decíamos, tal vez suene obvio y, cuando lo escuchamos en comerciales, hasta superficial. Pero no deja de ser una verdad que muchas necesitamos escuchar.
- Todas tus emociones tienen valor
Cuando el personaje de Margot Robbie se “descompone”, comienza a sentir una gama de emociones complejas que van más allá de la felicidad pura que experimentaba cada día en “Barbieland”. Cuando se abre a esas posibilidades, ya no hay marcha atrás: siente melancolía, preocupación, angustia, nostalgia y tristeza, por mencionar algunas.
La “Barbie estereotípica” descubre el placer de desahogarte con el llanto y lo agridulce de la nostalgia, y eventualmente le gusta.
Como en la vida, al principio quisieras desechar y borrar las emociones “negativas”. Pero son esas emociones las que te empujan y obligan a evolucionar, a abrazar el cambio que es natural. Al final terminas agradeciendo su existencia.
- No dejes que te digan cómo se ve el éxito
Uno de los mensajes más contundentes que hace la película es que el patriarcado, en todas las sociedades, también evoluciona para seguir poniendo obstáculos, controlando nuestras vidas y abriendo brechas de género. No es que desaparezca, es que finge mejor.
Este mensaje tal vez parezca poco esperanzador y hasta deprimente, pero necesitamos ponerlo a la vista. Nos corresponde a todas seguir reclamando el espacio que nos pertenece, el derecho a participar.
En concreto, la película ilustra esto mostrando una compañía que te vende una imagen de empoderamiento pero es controlada por una mesa llena de hombres de traje, quienes “apoyan” el empoderamiento siempre y cuando no vulnere sus privilegios.
Lo anterior se refleja incluso con la misma película. Sí, es una cinta feminista y no se le quita en lo absoluto su valor al trabajo de Greta Gerwig y su elenco. Pero probablemente el estudio multimillonario que produjo esta película tenga una mesa directiva mucho más parecida a la del “Mattel ficticio” que a “Barbieland”.
La cinta también ejemplifica con “Barbieland” siendo dominada por los “Ken”. En esta situación las “Barbies” creen que solo hay un tipo de éxito, ganándose la aprobación de ellos, y ellas llegan a creer que genuinamente están contentas con el rol que ellos les dieron.
- Eres merecedora de todos tus logros
Cuando la “Barbie rarita” y otras rebeldes intentan “desprogramar” a otra “Barbie” relatándole todo lo que ha logrado, la primera reacción de ella es cuestionar si realmente ha hecho lo que le están diciendo y si merece el reconocimiento.
Es un momento que genera una risa incómoda y también un pequeño guiño al “síndrome de la impostora”. Pero, afortunadamente, la “Barbie rarita” logra su cometido. De paso, nos recuerda que merecemos todas las cosas que hemos logrado y no le debemos explicaciones a nadie. Tus éxitos no son producto de la suerte y es importante recordarlo, por eso es una de las lecciones que “Barbie” nos dejó.
- No tienes que complacer a todos
Uno de los mejores monólogos de la película (tal vez el mejor) corresponde a “Gloria”, el personaje de America Ferrera. En su afán por desprogramar a las “Barbies”, estalla y muestra su frustración ante las exigencias que las mujeres aparentemente “tenemos que” cumplir en la sociedad.
Ser bonitas y arreglarnos pero no demasiado, ser inteligentes pero sin opacar a un hombre, ser amables y estar siempre en control, tener una carrera pero también formar una familia, ser “interesantes” pero también positivas al grado de rayar en lo absurdo. Estas son algunas de las cosas que (palabras más, palabras menos) menciona “Gloria”. Y solamente una directora y guionista hubiera podido incluirlo de manera tan acertada.
Lo que podemos rescatar es que, en efecto, ser mujer en una sociedad como la nuestra es profundamente injusto. Pero debemos tener claro que NO se trata de complacer a todos; si nos ponemos estrictas, no se trata de complacer a nadie más que a ti, finalmente.
- Tú YA estás completa
No hay mucho que decir para dejar claro este punto. Cada una de las “Barbies” que podemos ver en la película tiene un propósito y una pasión, independientemente de que estén acompañadas de un “Ken” o no. Especialmente la “Barbie estereotípica”, quien se da cuenta de que no desea estar en una relación.
Puedes decidir si quieres compartir tu vida con alguien, durante el tiempo que quieras. Pero tu esencia no depende de eso ni te hace “menos completa”.
- Todas merecemos un nuevo comienzo
Al final de la cinta, la “Barbie estereotípica” se abre paso a un nuevo comienzo como humana, con todo lo bueno y malo que eso conlleva. Sabe que la va a pasar muy bien pero también muy mal, pero también tiene claro que todo es parte de la experiencia humana.
Podría fingir que no pasó nada y seguir como en el día que la conocimos, pero prefiere ya no hacerlo ante las posibilidades que parecen estar esperándola. Sabe que es mucho más del rol que, se suponía, tiene que cumplir. Y, al estilo de la película “Soul”, nos muestra que simplemente se dedicará a vivir cada uno de sus días al máximo.