Canberra, Australia.- Millones de peces han aparecido muertos al sureste de Australia. Expertos aseguran que esta inesperada presencia se debe a una falta de oxígeno en los ríos después de las inundaciones y al aumento en la temperatura en la región.
El primer reporte sobre la presencia de estos animales muertos fue en la ciudad de Menidee, al interior de Nueva Gales del Sur. Habitantes de la localidad reportaron un fuerte olor a pescado podrido que llegaba desde el río.
“El hedor era terrible. Casi tuve que ponerme una máscara“, expreso un fotógrafo de la localidad. “Estaba preocupado por mi propia salud. Esa agua justo en la parte superior desciende a nuestra estación de bombeo para la ciudad. La gente al norte de Menindee dice que hay bacalao y perca flotando río abajo en todas partes”.
Debido a esta situación, la policía ha establecido un centro de operaciones de emergencia en la ciudad para coordinar una limpieza masiva esta semana.
Por su parte, agencias estatales también han proporcionado agua de mayor calidad para aumentar los niveles de oxígeno en el río cercano. Además, cambiarán el suministro de agua de los habitantes para evitar cualquier posible caso de intoxicación.
Australia no es ajeno a casos como este. Desde hace varias semanas, muertes masivas de peces se han reportado en ríos como el Darling-Baaka. La población de Menidee ya había experimentado un caso similar en 2018 durante una de las sequías más graves que han afectado la región.
Es en parte a este antecedente que los residentes y autoridades locales han sabido como responder ante la actual crisis, la cual esperan tener solucionada por completo durante los días próximos.
