NUEVO LAREDO, TAM.- Niños, jóvenes y adultos, encabezados por Monseñor Enrique Sánchez Martínez, obispo de la Diócesis de Nuevo Laredo, realizaron la Marcha por la Paz y por la Vida.
En la Explanada Baca Calderón fue el sitio de reunión. Desde temprano empezaron a llegar las delegaciones de cada uno de los Decanatos de las diversas parroquias en la ciudad. Globos, alegría, cánticos y además una mañana esplendorosa que fue excelente marco de esta marcha.
Al filo de las 10:00 horas salió, de la Explanada hacia la Catedral, recorrió toda la avenida Guerrero y parte de prolongación Guerrero para alcanzar Paseo Colón e ingresar hacia la Catedral del Espíritu Santo por Ocampo. Ahí ya eran esperados por miembros de Manos de María y de otras personas.
‘Esta es una marcha por la vida y por la paz, es una actividad que se desarrolla en todo el país, celebrando la fiesta de ayer La Anunciación del Señor, que para nosotros es la fiesta por la vida y una jornada para recordar la vida del no nacido. Nosotros manifestamos a la sociedad nuestra convicción como seres humanos y de preservar la vida desde la fecundación hasta el fin de la vida natural’, comentó Monseñor Sánchez Martínez.
‘Igualmente por la paz en el mundo y que termine la guerra que actualmente se vive, pero también por la paz en nuestro México. Se necesitan muchos signos de paz’, concluyó el Obispo.
Ahí, en las afueras de Catedral, se congregaron frente a la misma todos los que participaron en la marcha, así como decenas de personas que ya los esperaban. Todos juntos escucharon el mensaje alusivo a la vida y paz que ofreció Monseñor Sánchez Martínez.
