Mujeres víctimas de violencia política; Norma De la Cruz Magaña
Ciudad Victoria.- El Protocolo del Instituto Nacional Electoral (INE) para la atención a víctimas y la elaboración del análisis de riesgo en los casos de violencia política contra las mujeres en razón de género, brinda a la ciudadanía y a las mujeres víctimas de violencia directrices claras que guíen la actuación del personal público responsable de conocer este tipo de casos, desde el momento en que se presente la queja y con el fin de evitar su revictimización.
“Lo que estamos buscando es que cuando llegue una persona a presentar una queja cada una de las personas que laboramos en el INE sepamos cómo atenderla y canalizarla a la unidad adecuada, pero también saber qué hacer cuando se esté ante casos que pueden o pudieran ser constitutivos de delito”, estableció la Presidenta de la Comisión de Igualdad de Género y No Discriminación, Norma De la Cruz Magaña.
Al presentar el Protocolo en el marco del Foro nacional con autoridades electorales, jurisdiccionales y legislativas locales para el análisis de los resultados del proceso electoral 2020-2021 en materia de paridad de género, violencia política contra las mujeres en razón de género e inclusión, desde una mirada prospectiva hacia los próximos comicios locales, agregó que el documento también establece las acciones para los casos en los que el Instituto no sea competente.
“Aunque no seamos competentes detectamos que hay una urgencia de dictar medidas cautelas, nos da la guía de cómo realizar este análisis de riesgo, cómo se aplican los cuestionarios, cómo podemos leerlos, qué medidas de protección se tienen que hacer, se hace un énfasis en informar a las víctimas de sus derechos y de las posibilidades de cómo hacer un mejor ejercicio de ellos”, puntualizó la Consejera De la Cruz.
El Protocolo ofrece una guía desde la presentación de la queja al final y en este sentido el Director de la Unidad Técnica de lo Contencioso Electoral, Carlos Ferrer Silva, precisó que el Instituto Nacional Electoral no es una autoridad que pueda conocer, atender y remediar toda la violencia en todas sus dimensiones, pero sí debe canalizar a las instituciones y entes competentes para que las mujeres sean atendidas de manera adecuada y oportuna.
El Protocolo se desarrolló, añadió, porque en la ley no venía expresamente la atención y se elaboró un instrumento que guíe desde la presentación de la queja, hasta el final, es decir, de la A a la Z.
Explicó que al Protocolo lo integran los siguientes procedimientos: Atención de primer contacto a mujeres víctimas de violencia política en razón de género; análisis de riesgo; medidas de protección y un plan de seguridad.
“La atención de primer contacto con las víctimas supone que el personal esté calificado o que tenga elementos mínimos básicos para poder atender a las mujeres, es decir, el personal debe estar en condiciones de detectar alguna situación urgente de la mujer víctima de violencia, que puede ser médica, psicológica, de seguridad o cualquier otra que ponga en riesgo su integridad, seguridad o vida”.
Ramón Mendoza S
Reportero